Citometría y separación celular

La citometría de flujo es una técnica de análisis multiparamétrica que se basa en hacer pasar partículas en suspensión (células, microorganismos, micropartículas...) a alta velocidad (miles de partículas por segundo) ordenadas y de una en una a través de un haz de luz focalizado (láser). El impacto con el láser produce señales fluorescentes que corresponden a distintos parámetros (incluyendo el tamaño relativo de una partícula, su complejidad estructural y la intensidad relativa de fluorescencia). Un sistema óptico y electrónico recoge estos parámetros, los registra y los digitaliza para poderlos medir simultáneamente en una célula.

El citómetro de flujo mide características morfológicas de las células (tamaño relativo y complejidad celular...) y características antigénicas, biofísicas o bioquímicas (estudios membrana, contenido de ADN, actividad enzimática, proliferación, apoptosis...). Un separador celular tiene las mismas prestaciones que un citómetro de flujo, pero incorpora la capacidad de separar partículas o células selectivamente.

Las aplicaciones de la citometría de flujo y la separación celular son numerosas, por eso se ha generalizado su uso en el ámbito de la biomedicina (Hematología, Inmunología, Farmacología, Oncología, Microbiología, Genética...). La plataforma de citometría dispone de una amplia gama de aplicaciones de citometría de flujo y de separación celular y desarrolla o implementa otras nuevas en función de la demanda de los investigadores.