El uso de suplementos dietéticos y productos de herbolario ha aumentado notablemente en los últimos años, impulsado por la percepción de que los productos "naturales" son beneficiosos para la salud. La promoción online y la expansión de tiendas especializadas ha favorecido su popularidad. Sin embargo, muchos de estos productos no son tan inocuos como a menudo se piensa, especialmente en personas con patologías hepáticas.
Un peligro silencioso para el hígado
Los pacientes con enfermedades del hígado pueden incorporar estos productos en su consumo habitual sin conocer los riesgos que pueden comportar. Esto es especialmente preocupante porque el hígado es el órgano encargado de metabolizar muchos de los componentes que contienen estos suplementos, y varios de ellos se han asociado a casos de hepatotoxicidad.
Los llamados HDS (de las siglas en inglés de Herbal and Dietary Supplements) incluyen una gran variedad de productos, como vitaminas, minerales, extractos de plantas. etc. Aunque algunos pueden tener efectos beneficiosos documentados, muchos no disponen de estudios rigurosos que garanticen su seguridad. Además, a menudo los pacientes no informan de su consumo durante las visitas médicas.