Diagnóstico de Hernia Discal Lumbar

Historia médica y examen físico. Después de revisar el historial médico del paciente, el profesional sanitario examina la columna. Algunas de las pruebas son:

• Examen neurológico. Sirve para detectar debilidad o pérdida de sensibilidad. Para comprobar si hay debilidad muscular, se evalúa cómo la persona camina apoyado en sus talones y dedos del pie. También se comprueba la fortaleza del muslo, tobillo y dedos del pie. El profesional sanitario puede detectar una pérdida de sensibilidad, probando si se siente un toque suave en la pierna y el pie. Además, se comprueban los reflejos en la rodilla y el tobillo que, a veces, pueden estar ausentes.

• Prueba de elevación de la pierna recta (SLR). Esta prueba predice de manera muy exacta una hernia de disco en pacientes menores de 35 años. En esta prueba, la persona permanece acostada boca arriba y el profesional sanitario le eleva la pierna afectada. La rodilla permanece recta sin flexionar. Si se siente un dolor que recorre la pierna desde la rodilla hacia abajo, la prueba es positiva para una hernia de disco.

Estudios complementarios. 

• Para ayudar a confirmar un diagnóstico de hernia de disco, se puede recomendar un estudio con imágenes de resonancia magnética (MRI). Este estudio puede crear imágenes claras de los tejidos blandos como los discos intervertebrales.
• En casos de extrema urgencia, una Tomografía axial computarizada (TAC) podría ser suficiente para realizar el diagnostico de casos extremos.
• Electromiografía. Se realiza en situaciones específicas, cuando la clínica es importante pero los estudios de imagen ofrecen informaciones ambiguas, la electromiografía asociada o no al estudio del potencial evocado somatosensorial (PESS) puede ayudar a definir el diagnóstico.